La Orquesta Sinfónica Nacional de Chile es la agrupación sinfónica de mayor trayectoria del país y la primera creada como organización estatal permanente y duradera. Considerada Patrimonio Nacional, ha mantenido un alto prestigio por su calidad artística y por su importante labor en cuanto a la difusión de la música de autores nacionales, clásicos y contemporáneos.
Fundada en 1941, tuvo su concierto inaugural el 7 de enero de ese año en el Teatro Municipal de Santiago, con la conducción de Armando Carvajal, su primer director titular. Este rol actualmente lo desempeña el maestro Rodolfo Saglimbeni. La orquesta está integrada por más de 90 músicos del más alto nivel y desarrolla una extensa temporada con una variedad de programas presentados en Santiago y otras regiones. Asimismo, extiende su labor de difusión a estudiantes de diferentes sectores.
Su repertorio abarca desde el período Barroco al Contemporáneo, pasando por clásicos universales. Ha estrenado prácticamente la totalidad de las obras sinfónicas y sinfónico-corales escritas en el país, en un comienzo en los Festivales Bienales de Música Chilena, iniciados en 1948, y hoy en sus temporadas oficiales en el Teatro Universidad de Chile. Asimismo, ha realizado diversas giras a lo largo de todo el país, incluido Rapa Nui, y al extranjero, presentándose en países como México, España, Alemania, Perú y Argentina.
A lo largo de su historia, grandes personalidades de la música como Leonard Bernstein, Igor Markewitch, Sergiu Celibidache, Herbert von Karajan, Eugene Ormandy, Fritz Busch, Erich Kleiber, Antal Dorati y Sir Malcolm Sargent encabezan una larga lista de maestros de prestigio que participaron en las temporadas de conciertos. Uno de los hitos más recordados fue la visita a Chile del compositor ruso Igor Stravinsky en 1960 para dirigir personalmente La Consagración de la Primavera. Como él, Paul Hindemith, Heitor Villa-Lobos y Aaron Copland, entre otros, dirigieron sus obras ante el público chileno. La Sinfónica actuó también bajo la batuta de influyentes músicos chilenos como Enrique Soro, Juan Casanova Vicuña y David Serendero.
Ha sido reconocida en numerosas ocasiones, como con el Premio de Arte en Música en 1977, el Premio APES al Mejor Grupo Orquestal en 1990, el Premio de la Academia de Bellas Artes de Chile en 2001, el Premio del Círculo de Críticos de Arte de Santiago en 2009 y el APES en 2010 por su “aporte de excelencia al arte musical en Chile”. En 2011, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes le otorgó el Premio a la Música Presidente de la República en reconocimiento a su trayectoria de más de 70 años aportando al desarrollo y consolidación de la identidad musical chilena. En 2016, en tanto, recibió el Premio del Senado de la República de Chile por su trayectoria y aporte al desarrollo cultural del país.